La asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA), el principal foro político del continente, aprobó el martes una resolución promovida por Estados Unidos que abre la puerta a una eventual suspensión de Venezuela del organismo por quiebre del orden democrático.
La iniciativa, adoptada por 19 votos a favor, cuatro en contra y 11 abstenciones, declara ilegítima la reelección de Nicolás Maduro y llama a aplicar los mecanismos de la Carta Democrática Interamericana por "alteración del orden constitucional", un proceso que podría derivar en la suspensión de Venezuela de la OEA.
El texto, promovido por Estados Unidos, fue presentado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, México y Perú, con el copatrocinio de Costa Rica, Guatemala y Paraguay.
La resolución superó la mayoría simple necesaria del total de miembros de la OEA, que oficialmente son 35 aunque activos hay 34 porque Cuba no participa.
Además de Venezuela, que se pronunció "rotundamente en contra", se opusieron Bolivia, San Vicente y las Granadinas y Dominica.
La mayoría de los países caribeños, tradicionales aliados de Caracas, que les vende su petróleo en condiciones muy favorables, se abstuvieron, así como Ecuador, Nicaragua, El Salvador y Uruguay.
La aprobación de esta resolución, que además de facilitar el "restablecimiento del orden democrático" busca atender la crisis humanitaria en Venezuela, puede llevar a la suspensión del país de la OEA, pero no de manera inmediata.
Para suspender a un Estado miembro de la OEA se deben tener dos tercios de los votos afirmativos en una asamblea general extraordinaria, cuya convocatoria también requiere 24 votos.
El consejo permanente de la OEA ya declaró en abril de 2017 que en Venezuela se había producido un quiebre inconstitucional, pero luego no logró pronunciarse sobre el tema en su asamblea anual en junio en Cancún.